Resiliencia

Enfoque de la Resiliencia

El ser humano a lo largo de su vida está en continuo proceso de cambios en su estado físico y emocional. Algunos de estos son propios de las edades y otros, tiene que enfrentarse a eventos cotidianos esperados e inesperados. Su estado emocional va a estar sujeto a su filosofía de vida que lo conduce a reaccionar ante los acontecimientos de forma que se encamina a resultados positivos o negativos. Es así que una experiencia desagradable e inesperada puede fortalecer o abatir emocionalmente a una persona .He ahí por lo tanto la importancia de la resiliencia.   

¿Qué es la Resiliencia?

Es un proceso a través del cual el ser humano crece, se transforma y mejora los acontecimientos y dificultades de tal manera que se levanta más fortalecido emocionalmente y exitoso a través de las fortalezas internas que posee y los recursos externos con que cuenta.

El término resiliencia se refiere a la capacidad que tienen                                                                                                                                                                             las personas, que a pesar de enfrentarse a circunstancias desagradables y ambientes de alto riesgo, se desarrollan y se mantienen psicológicamente sanas y exitosas.

Características de la resiliencia

Cabe destacar, que todos los individuos tienen la capacidad de desarrollar la resiliencia. La manera como se alcanza es un proceso individual que con lleva actitudes (cualidades), pensamientos y conductas que pueden ser aprendidas y/o modificadas por cualquier persona. Para desarrollarla no existe edad, cultura, religión, status económico, político o social. En todas partes del planeta hay personas resilientes.

La resiliencia es la forma positiva y saludable de enfrentarse a la vida y a sus circunstancias. Es un proceso de adaptación que se desarrolla progresivamente con el tiempo. Las personas resilientes no están exentas a experimentar sentimientos de tristeza ante las dificultades y acontecimientos. Lo que las distingue de las otras personas es que saben sacar beneficios de esas experiencias y conflictos, a medida que surgen en la vida y se van volviendo más fuertes emocionalmente ante los obstáculos; transformándose en mejores seres humanos.

Componentes de la Resiliencia

En el proceso del desarrollo de la resiliencia intervienen dos elementos fundamentales:

1.    Las fortalezas internas  del ser humano.

2.    Los recursos externos con que cuenta el individuo. Estos componentes van unidos a los factores de riesgo, su medio ambiente y los factores de protección. Se define el factor de riesgo como la circunstancia o evento que amenaza la estabilidad física o emocional del individuo  y el de protección representa el apoyo y/o ayuda que recibe de otros ante una dificultad o el uso de sus cualidades individuales para manejarla.

Cualquier etapa en la vida es apropiada para fomentar la resiliencia por o que está tiene un enfoque educativo y preventivo.

Sin embargo, lo fundamental es despertar el optimismo y la esperanza en el individuo que desea emprender la tarea de desarrollarla y hacerla como propia filosofía de vida.

Hay unas características frecuentes  de las personas resilientes:   

·         Cuentan con una persona o personas significativas en su vida de quienes reciben afecto y apoyo incondicional (un familiar o un amigo) no necesariamente significa alguien con quien mantenga vínculo amoroso.

·         Buscan sentido y significado a su vida y se afanan continuamente hacia su crecimiento personal.

·         Tienen metas claras, buen carácter, alta autoestima, valores religiosos, optimismo, destrezas de socialización, flexibilidad, generosidad, sentido de humor positivo, autonomía, control de impulsos, introspección, creatividad, habilidad para resolver problemas, empatía y pensamiento crítico.

Estrategias sugeridas para la construcción de su propia resiliencia

·         Fortalezca su crecimiento personal

Procurar ser cada día mejor ser humano mediante el conocimiento de sus fortalezas y debilidades. Los aspectos positivos son motivos para sentirse bien consigo mismo. Uno de los recursos puede ser mediante la lectura de material de superación personal, buscando ayuda individual en los programas de orientación psicológica para conocer la forma en que se enfrenta a trabajar sus dificultades, tristezas. De no afrontarlos positivamente se corre el riesgo de que se conviertan en grandes obstáculos en el logro de sus metas personales.

Establecer metas a corto, mediano y largo plazo y dirija sus actividades diarias hacia el logro de las mismas. Fíjese metas, maneras de alcanzarlas y evalúe periódicamente sus logros.

Fortalecer su autoestima reconociendo su valor como persona, sus derechos y responsabilidades. Entre estos cabe mencionar el derecho a ser feliz, ser respetado y superarse.

Practicar regularmente algún deporte o alguna actividad de esparcimiento que le ayude a despejar la mente.

·         Fortalezca y amplíe sus vínculos y redes de apoyo

Los padres y madres son los primeros con los que se relacionó durante su proceso de crecimiento. Pero también cuenta con otros familiares como primos, tíos, abuelos, hermanos, con quienes puede mantener relaciones de afecto y aprecio. Mantenga amistades que sean influencias positivas.

Por otra parte, es necesario que desarrolle las destrezas de socialización y de comunicación asertiva porque así se podrá relacionar bien con las otras personas y obtener las herramientas necesarias para participar en actividades grupales educativas, sociales y culturales de su comunidad. Todas ellas le ayudarán a conectarse con otros, crecer como ser humano y a mantener su equilibrio emocional.

Tomado del Manual práctico de prevención integral del consumo de alcohol, tabaco y otras drogas para la capacitación del Poder Popular, Plan de Prevención Integral, Sembrando Valores para la Vida 2007-2013, Oficina Nacional Antidrogas, Segunda Edición año 2010, págs. 34,35 y 36.